TIPOS DE SOLUCIONES

Solución es una porción de materia que contiene dos o más componentes, los cuales se encuentran distribuidos uniformemente a nivel molecular. Se puede considerar una solución como una mezcla homogénea, ya que no se pueden apreciar la diferencia entre los componentes que la constituyen.

La solución a grandes rasgos se puede considerar como la combinación de sustancias las cuales por sus niveles de concentración se pueden clasificar como soluto y solvente.

El soluto es el tipo de materia que se encuentra en menor densidad en la solución, en otras palabras es la sustancia que se desea disolver.

El solvente por su parte es el tipo de material más abundante dentro de la solución, y se le denomina el medio en el cual se desea disolver al soluto.En el ejemplo del agua y azúcar, el agua es el solvente y el azúcar el soluto.

Las soluciones se pueden a su vez clasificar debido a la relación que guardan el soluto y el solvente en: diluida cuando la cantidad de soluto es pequeña, en concentrada cuando la cantidad del soluto es muy grande y, en saturada cuando se aumento mas soluto en un solvente a mayor temperatura de la normal (esto es porque cuando ya no se puede diluir, se calienta el solvente y se separan sus partículas para aceptar mas soluto).

Las soluciones se pueden dar en la mezcla de materiales de distintos estados físicos o de agregación, los cuales pueden ser gas en un líquido, líquido en líquido, sólido en líquido, gas en gas, líquido en gas, sólido en gas, gas en sólido, líquido en sólido y sólido en sólido.
A todas las soluciones donde el solvente es el agua, se les denomina solución acuosa.

En una solución el soluto y el solvente pueden existir como moléculas (agua con azúcar) o como iones (agua con sal, que se les denomina electrolitos por que pueden conducir electricidad), en ambos casos tanto las moléculas como los iones del soluto están rodeados por moléculas de agua en la solución.

A la hora de llevar a cabo una solución, existen factores que pueden influir en la solubilidad del soluto en el solvente, dentro de las cuales podemos señalar las propiedades químicas (iónicos, polares) del soluto y el solvente, y la temperatura. En cuanto a la velocidad con que se disuelve el soluto, puede ser influida por el tamaño de las partículas del soluto, la velocidad de agitación y la temperatura a la que se lleve a cabo.